FUGA A 4 VOCES SOBRE EL NOMBRE DE BACH

Op 75-A  1985

 

Esta fuga es la cuarta variación de una obra llamada BACHIANA OP 75 PARA CUERDAS. Tema, Tres Variaciones y Fuga a cuatro sobre el nombre de Bach
Lo que aquí presento es  una versión para piano a 4  manos, de la  Fuga.
Fue estrenada  en Viña del Mar  por Ana María Cvitanic y Erika Vöringer en la sala del Club de Viña del Mar  en 1985. No hubo grabación.

Existe también la versión para orquesta sinfónica. Esta versión orquestal, fue parcialmente estrenada en un concurso de la orquesta sinfónica de Chile en ese mismo año.  Fue éste, un curioso concurso en el que competían las obras seleccionadas previamente, al mismo tiempo que los directores asignados a cada una de ellas. No recuerdo qué ocurrió con las otras obras premiadas, pero de la mía sólo se tocó el coral inicial y la fuga final. La obra entera dura 28 minutos; la fuga, 3 minutos.

Mi opinión con respecto a mi obra, es que no ha sido comprendida por todos. Cuando la presenté   anteriormente, con motivo de un concurso dedicado a Bach, sólo fue preseleccionada.  Al parecer no se entendió que todo lo que compuse fue basado en el nombre de Bach y en procedimientos contrapuntísticos bachianos.

La fuga de mi partitura, es un caso de experimento en toda su amplitud. Y además una locura.  Es que, una fuga, por definición es una obra tonal. Las voces van entrando, una por una, pero en distintas tonalidades. Así, por ejemplo, si el tema está en tonalidad de do mayor. La segunda voz entra en tonalidad de sol mayor y la tercera voz retoma el do mayor. En el caso de 4 voces la tercera puede   ser en sol, como la primera voz, y la cuarta retomar el do. Todo esto esquemáticamente pues las cosas pueden ser mucho más variadas. 

Bach es el maestro indiscutible.

Cada tema tiene 2 partes; pregunta y respuesta, para entenderlo mejor. Antecedente y consecuente, para decirlo de otra manera.  En mi fuga esto se cumple.

El problema arduo era escribir una fuga atonal. En cierto sentido, esto es una barbaridad, un imposible, un contrasentido y una falta de respeto a los músicos tonales como Bach.  Pero yo intenté hacerlo imitando una tonalidad (que no existe) usando para la segunda voz, la misma serie dodecafónica una quinta superior; para la tercera otra quinta superior y otra quinta superior para la cuarta vez. Siempre la misma serie. Esto lo encuentro de lo más artificioso.

Si bemol-Fa- Do-Sol.

 

Pero yo ya había hecho lo mismo en una fuga a 3 voces en mi obra “Tema y variaciones para piano y clarinete sobre una serie de Juan Amenábar”. Para mi gusto fue un éxito. El engaño resulta.

Por eso intente esta vez con una fuga a 4 voces. Creo que funciona bien.

De más está agregar que el trabajo que esto supone es enorme ya que se supone que las voces sean independientes. Sin embargo, a mi modo de ver, lo más difícil es que la obra suene interesante, con lógica, con sentido y no mecánicamente. Por qué no decirlo; que sea bonita.

Yo encuentro que es una obra lograda.

La versión orquestal definitiva, consta de solamente 4 partes: Coral, Danza, Scherzo y Fuga. La segunda variación se descartó para tener mayor contraste en los movimientos.


Hernán Ramírez Ávila


13 de mayo de 2023. Viña del Mar


Nota: Al lado derecho del video aparece  la página donde se explica la gestación de las series de la Fuga. Cómo  no me  fue posible ponerla

de manera  que se pudiera leer su contenido, he  creado una página llamada "Series de la fuga a 4 "que contiene  exclusivamente esta página.